Un clan de sicarios grababa sus propios asesinatos en el Callao y varios distritos de Lima. La muerte y el dinero llevaron a las calles a los matones más peligrosos que operaban también en los distritos de Los Olivos y San Martín de Porres (SMP).
Panorama conversó con las madres de tres de sus víctimas. Sin embargo, estos criminales habrían atentado contra la vida de ocho personas, de acuerdo a las diligencias de los agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP).
Las cámaras de seguridad registran los asesinatos a manos de estos criminales, pero en sus celulares se guardan los videos más espeluznantes de sus brutales ataques. En sus redes sociales publicaban armas de fuego y la ferocidad con la que acaban con la vida de sus víctimas.
Según investigaciones policiales, los sicarios mataban por control en las zonas de venta de drogas y cobros de cupos incumplidos.