El grupo de élite de la Policía Nacional, los Sinchis de Mazamari, ubicaron y destruyeron nueve laboratorios ubicados en el Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM).
El operativo policial demoró dos días y se realizó en la región Cusco, en el centro poblado Natividad, en el distrito de Pichari.
Estos espacios tenían capacidad para producir entre 400 a 500 kilos de pasta básica de cocaína. Con la intervención se pudo evitar la distribución de más de 280 kilos de droga.
