Nueva disputa por 'hackers'. El Departamento de Justicia de los Estados Unidos acusó a seis piratas informáticos de la inteligencia rusa de una ola de piratería de cuatro años, que incluyó ataques a los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang en 2018 y las elecciones francesas de 2017.
Las involucrados formaban parte de la Dirección Principal de Inteligencia de Rusia, agencia bajo el control del régimen de Vladimir Putin. Según los informes, Moscú habría logrado infiltrarse en diversas plataformas gubernamentales y causó numerosos daños en Francia, Georgia, Países Bajos, Corea del Sur, Ucrania, Reino Unido y Estados Unidos.
Funcionarios británicos también acusaron a los piratas de intentar interrumpir los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio el próximo año. Según expertos en ciberseguridad, el ataque sería solo el último de una serie que tiene como blanco organizaciones deportivas internacionales, y que fueron orquestados por Rusia.
