El presidente Donald Trump afirmó que Estados Unidos no necesita el petróleo o el gas del Oriente Medio. Esto luego de los ataques a la petrolera estatal de Arabia Saudita, Aramco, apoyados por Irán.
Y es que en unas cavernas de sal a casi un kilómetro bajo la superficie, en las costas de Texas y Luisiana, guarda uno de sus mayores tesoros para tiempos turbulentos: millones de barriles de petróleo.
El crudo fue llevado hasta allí y se conserva meticulosamente año tras año. Trump acaba de autorizar la liberación de petróleo de esa reserva estratégica para que se garantice el suministro mundial.
Debido a la gran reserva de petróleo que posee Estados Unidos muchos cuestionan si se deben mantener las reservas. Hasta ahora los presidente de Estados Unidos han autorizado su uso en escasas ocasiones.