El caso de Nadia, una estudiante de Medicina de la ciudad de La Plata, en Argentina, ha generado una ola de protesta de diversas organizaciones de la sociedad civil, ya que no es el primer caso de intento de agresión sexual a mujeres.
La joven regresaba a su casa cuando, al llegar a su edificio, se encontró a un hombre al que dejó pasar, pensando que era un vecino. Una vez en el interior, cuando la muchacha se disponía entrar en su departamento, el sujeto "le pegó un puñetazo y empezaron a forcejear".
El agresor quiso arrastrarla del pelo hasta una habitación, ella intentó escapar pero entonces, y según reveló su hermano menor, "le volvió a agarrar, le golpeó y ella, sin pensarlo, salió corriendo y saltó por el balcón".
Los vecinos, alertados por los gritos de la muchacha, acudieron a ver qué ocurría y encontraron a Nadia tirada en el suelo. Los mismos, retuvieron al agresor hasta que llegó la Policía.
La joven cree que el hombre no quería robarle, sino violarla, porque en ningún momento le pidió la cartera ni algún otro objeto de valor, sólo le decía que se callase y que no gritase.
