Al descubierto. El jefe del Gabinete checo entabló una conversación bochornosa y reveladora con los titulares de Defensa y Finanzas, sobre los funerales del fallecido líder sudafricano Nelson Mandela.
Jiri Rusnok supuso rápidamente que tendría que acudir al funeral de Madiba. “Qué problema, ¿y quién va a ir?”, se quejó. La molestia era provocada principalmente por dos factores: una agenda recargada, y lo incómodo que le resultaba al titular hacer un viaje tan largo.
Continuó: “Espero que vaya el presidente (Milos Zeman). Carajo, me entran escalofríos de ir”, dijo al ministro de Defensa, Vlastimil Picek (que está a la derecha), ninguno de los dos se daba por enterado de que el micrófono delante de ellos estaba encendido.
Durante el hecho ocurrido en el Parlamento, aún sin participar en la conversación, los acompañaba el ministro de Finanzas Jan Fischer (ubicado al lado izquierdo). “No me apetece para nada ir, para nada. Y sí, carajo, eso está en el quinto guá. ¿Y tengo que ir en línea regular o en otra?”, prosiguió el primer ministro.
Momentos después, Rusnok manifestó tener la esperanza de que el mandatario Zeman acuda a la ceremonia en representación del país. “¿Me puedes decir cómo sube las escaleras del avión?”, preguntó Picek. “No lo sé”, contestó Rusnok.
Cabe señalar que el Jefe de Estado está recuperándose de una fuerte caída que lo hace utilizar muletas durante su recuperación. Espontáneamente se sumó al cotilleo el ministro de Finanzas, Jan Fischer, quien dijo: “Es una tontería eso. Si lo enviamos, nos lo haría pasar muy mal”.
A esto, Rusnok respondió: “Seguro que no vuela. Estamos jodidos”. Tras filtrarse el diálogo, que avergonzó a los funcionarios de alto nivel, el Jefe del Gabinete pidió disculpas en un mensaje de texto enviado a la agencia de noticias checa CTK horas más tarde.
