El amor llega cuando menos se lo espera y no hay mejor ejemplo que Karla Tarazona y Rafael Fernández. Aunque con algunos reparos al principio, esta pareja que se conoció en una reunión de amigos no tardó mucho en darse cuenta que eran el uno para el otro.
El empresario, ni corto ni perezoso, se apresuró a 'amarrar' a su amor y se comprometió con ella, con el respectivo anillo de diamante de por medio. Pero eso no es todo, porque Rafael incluso se dio tiempo para enamorar a los hijos de su nueva pareja.
Y es que él también le pidió a los hijos de Karla la mano de su mamá. Ambos desde ya ponen el parche y afirman que solo se enfocarán en su felicidad y no en lo que digan los demás. Alas y buen viento.