La familia de José Zuñiga Molina (35) quien fue brutalmente asesinado a pedradas cuando celebraba una reunión por el Día del Padre en el Rímac, pidió justicia luego de que el sospechoso, Jesús Nuñez Vilela, fuese capturado en San Martín de Porres.
Los familiares del hombre, quien deja cuatro hijos en la orfandad, reconocieron plenamente a este ciudadano extranjero y exigieron que no sea liberado ni deportado por jueces y fiscales. Amenazaron con tomar la justicia con sus propias manos.