Julio Tito Quispe, el ‘Monstruo de Carapongo’, capturado por secuestrar y tocar indebidamente a una niña de apenas 6 años de edad, dio sus macabras confesiones ante los agentes. Contó cómo llevó a la menor hasta su casa para abusar de ella y luego abandonarla en otro distrito.
Luego de que este caso saliera a la luz el pasado sábado 12 de octubre, en La Victoria, la opinión pública se horrorizó al conocer que fueron cuatro las niñas que fueron víctimas de este depredador sexual en los últimos meses.
Tras pasar por las pericias, el perfil psicológico de este sujeto arrojó que “proyecta un impulso sexual exacerbado y tiende a desvalorizar a la figura femenina, a la que percibe como un objeto sexual, aprovechándose de aquellas que son vulnerables”.
Este inescrupuloso que acechaba a indefensas menores bajo la fachada de un taxista, es un reflejo del peligro que corren las niñas en nuestra sociedad. Podría ser condenado a cadena perpetua.
