La Policía detectó una fiesta en una vivienda de Trujillo, pero cuando quiso proceder a su intervención, los presentes intentaron huir. La familia no llevaba mascarillas, bailaban pegados y usaban un mismo vaso para beber licor.
Algunos invitados intentaron escapar por la puerta trasera de la vivienda, pero la rápida intervención policial impidió su intento y terminaron en la comisaría de Laredo, donde se les acusó por delito de resistencia y desobediencia a la autoridad.