La tercera vicepresidenta del Congreso, Rosselli Amuruz, se mantiene firme en su puesto a pesar de los cuestionamientos y pedidos de renuncia. Patricia Chirinos, congresista de su misma bancada de Avanza País, ha sido una de las voces que ha sugerido que Amuruz debería dar un paso al costado.
Sin embargo, la parlamentaria descarta cualquier posibilidad de renunciar a la Mesa Directiva al asegurar que no ha cometido ningún delito. Si bien es criticada por su participación en la fiesta donde fue asesinado una persona, ella señaló que acudió a la celebración como una invitada.
Pero esta versión quedaría descartada, pues según un músico contratado para el evento, su orquesta fue contactada por una de las trabajadoras del despacho de Amuruz. Incluso, los trabajadores de Amuruz habrían hecho una colecta para homenajear al excongresista Paul García en su cumpleaños.
Además, la empresaria que ofreció el servicio de catering para la fiesta aseguró que fue la propia congresista quien pagó el 50 por ciento del servicio brindado por adelantado a través de una transferencia. Esto sumado a que la parlamentaria repartió invitaciones virtuales a diferentes personas.
INVESTIGACIONES EN CURSO
En tanto, el presidente de la Comisión de Ética, Diego Bazán, y miembro de la bancada de Rosselli Amuruz, anunció el inicio de una investigación de oficio contra la tercera vicepresidenta del Parlamento respecto a sus viajes al extranjero durante algunas semanas de representación.
