El futbolista Jean Deza volvió al ojo de la tormenta luego de ser intervenido en una fiesta clandestina en pleno horario de toque de queda. El exdelantero de Alianza Lima participaba en la reunión dentro de una discoteca ubicada en el distrito de San Martín de Porres.
Pese a que es de conocimiento público que las reuniones sociales se encuentran prohibidas por la pandemia de la Covid-19, el integrante del club Binacional no reconoció su infracción y entre risas dijo “que se encontraba de vacaciones”.
En el lugar también se encontraba el jugador altiplánico Johan Arango, natural de Colombia. En total, fueron más de cincuenta personas intervenidas en la discoteca K-OZ, ubicada en la avenida Carlos Izaguirre.
Todos fueron trasladados a la comisaría Sol de Oro para ser multados por infringir las normas de confinamiento social y la inmovilización social obligatoria.
