El municipio de Miraflores, Ministerio Público, Sunafil y la Policía Nacional, intervinieron hostales y hoteles para corroborar que cumplan con el aislamiento decretado por el Gobierno para frenar el avance del coronavirus.
Ellos llegaron hasta la calle Casimiro Ulloa donde corroboraron que una decena de turistas incumplía la cuarentena. Ellos tomaban sol y se encontraban reunidos mientras departían juegos de mesa.
Asimismo, otros se encontraban en el lobby de sus hospedajes leyendo libros o tomando aire fuera de sus habitaciones. Durante el operativo a estos establecimientos, también se encontró a un hombre de 60 años que fue enviado a su casa.
Cabe resaltar, que los restaurantes y cafeterías no deben funcionar en estado de emergencia ya que no representan servicios esenciales. Por ello, recomiendan llevar la comida a las habitaciones de los huéspedes y clausurar los espacios para evitar la aglomeración.