Cosme Rafael Villegas Peña de 73 años, asesino confeso de la ciudadana venezolana, Lizmar Hernandez Farías, participó de la reconstrucción del crimen que había perpetrado contra su víctima a través de un disparo en la cabeza en la localidad de Canta.
Frente a los efectivos policiales, el hombre relató que fue con ella hasta el pueblo de San Cosme y posteriormente al cementerio de San José para llevarle flores a su padre fallecido. Luego se dirigió a la quebrada de Huarimallo, ubicada a mitad de camino. Cosme Villegas le aseguró a su acompañante que su vehículo presentaba fallas. En ese momento, le pide que retire agua de una honda quebrada.
Al descender, la joven extranjera recibió un disparo en la cabeza por parte de su homicida. Después de matarla, guardó su arma en la parte trasera del vehículo y se marchó a Lima. Finalmente. el hombre señaló estar arrepentido.