Luego de producirse un nuevo derrumbe en la Costa Verde, las alarmas volvieron a encenderse. Y es que pese a la declaratoria de emergencia, poco o nada se ha avanzado al respecto. Sin embargo, una de las causas posibles sería por las aguas subterráneas.
“El río Rímac y sus brazos fueron dejando estos remanentes. Esa agua circula por el medio de este acantilado que tendría promedio de 45 metros, humedeciéndola”, explicó el regidor de Lima, Jorge Valdez.