El sujeto fue encarcelado anteriormente por homicidio por arrollar a una persona, por tal motivo se le había prohibido volver a manejar. Al notar que los efectivos estaban a punto de intervenirlo se dio a la fuga a toda velocidad ingresando a distintos suburbios, poniendo en peligro la vida de los transeúntes, esquivando a todo vehículo que se le ponía en frente.
Tras varias horas y kilómetros de persecución, terminó chocando contra un autobús y rápidamente el prófugo fue detenido por los policías.