Volverte a ver

11/03/2018

Seguimos celebrando los 250 reencuentros de Volverte a Ver

En una segunda edición de la celebración del programa, recordamos emotivas historias que hicieron vibrar nuestros corazones.




Volverte a Ver sigue celebrando los 250 programas del programa, por eso recordamos dos historias espaciales de reencuentro. La primera es la historia de Diego, quien luego de ser separado de sus hermanos, aún tiene la esperanza de volver a ver a su hermana, aunque 60 años han pasado desde la última vez que los vio.

En 1958 vio a su familia desvanecerse. Diego vivía junto a su padre, madre y hermanos en Requena. A los 16 años, sus padres se divorciaron y separaron a los hermanos, el padre se llevó a los varones y la madre a las mujeres. Después de esa dolorosa separación, los hermanos no se volvieron a ver.

De los cuatro hermanos, Diego, que vive en Iquitos, sabía que una de ellas estaba viva, aunque varios años habían pasado, su corazón le decía que era así. Gracias al equipo de Volverte a Ver, Anita, una de las hermanas menores de Diego, fue encontrada en Lima y pronto reunieron a los dos hermanos que anhelaban reencontrarse después de 60’ años.

Otra impactante historia viene desde Chimbote, con Reyna, quien luego de ser obligada a entregar a su bebé a otra familia, intenta encontrarlo nuevamente. Han pasado varios años, el hijo perdido ya es un abogado y por fin Reyna puede calmar su corazón al encontrarlo y verlo convertido en todo un hombre.


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