El segundo vicepresidente de la República calificó de calumnia las acusaciones en su contra sobre un presunto tráfico de influencias y, dijo que es parte de una campaña para dejarlo fuera de la comisión parlamentaria que investiga al gobierno aprista.
“Evidentemente quieren tumbarse, con algunos conspiradores, a la gente de la megacomisión que está investigado el gobierno pasado, algún interés tiene, ya salió Heriberto Benítez que es un buen fiscalizador y ahora quieren a Chehade”, indicó.
El parlamentario dijo que las afirmaciones infundadas no lo detendrán en sus labores parlamentarias y de fiscalización en el Congreso. “No ha habido ningún tipo de actos preparatorios o de desalojo. Es una calumnia del general Guillermo Arteta”, agregó.
Chehade sí reconoció que se reunió con jefes policiales como Raúl Salazar para conversar temas de seguridad ciudadana, pero no sobre acciones para un desalojo, como lo dio a entender Arteta.
“Lo que ha sucedido es que este señor por un resentimiento o venganza (...) por la restructuración que se está haciendo a la Policía Nacional a manos del Presidente de la República y la Presidencia del Consejo de Ministros”, subrayó.
