Daniel Enrique Salaverry, por meses el benjamín engreído de Fuerza Popular, hombre de confianza de Keiko Fujimori, el portavoz de los mensajes más duros y prepotentes de su bancada, fue esta semana el gran protagonista de una secuencia de hechos que derivaron en que FP no sea más mayoría en el Congreso.
Que como mayoría no estuvieron a la altura de las circunstancias, sino todo lo contrario, es verdad, un hecho irrebatible, lo que no quita la metamorfosis hoy efusivamente aplaudida que se ha visto en el presidente del Parlamento.
Marco Vásquez y Eduardo Cobos con el reportaje y una historia en torno a la que empezó siendo la primera fuerza política del país y hoy ve su poder abrumadoramente mermado, mientras las renuncias parecen no detenerse.