En un amplio operativo realizado en la ciudad de Carabaya, en Puno, las autoridades encontraron diversos equipos empleados en la minería ilegal, los cuales fueron destruidos inmediatamente por los agentes policiales.
En la operación, realizada el último jueves, se dinamitó también varios campamentos usados para esta actividad ilegal. Según los efectivos, el valor total de los aparatos destruidos asciende a un S/1,5 millones.
Según se conoció, la intervención policial se ejecutó a lo largo de unos cinco kilómetros del río San Gabán, entre las zonas de Chaullamayo y Boca San Gabán, sectores prohibidos para actividades mineras.
En la zona de acción se halló hondonadas con evidencia de reciente actividad minera ilegal, así como ambientes rústicos con indicios de haber sido habitados por personas, informa el diario Perú 21.