El gobierno chino ordenó el confinamiento de 11 barrios de Pekín donde se detectaron nuevos casos de coronavirus, ante el temor de un rebrote de la enfermedad, como está ocurriendo en países que decidieron levantar la emergencia sanitaria.
Las autoridades informaron de seis casos, vinculados al mercado de carne Xinfadi, en el distrito de Fengtai, al sur de Pekín, que fue cerrado. Decenas de personas, que viven en los alrededores de ese centro de abastos, dieron positivo al coronavirus.
Asimismo, retrasaron la vuelta a las escuelas de la ciudad de Pekín y suspendieron todos los actos deportivos debido a la aparición de estos casos, tras dos meses sin detectarse ninguna infección por Covid-19.
Estos contagios hacen temer que la pandemia resurja en China, donde brotó en diciembre en la ciudad de Wuhan (centro). Las autoridades controlaron la expansión con un férreo confinamiento, que fue levantándose a medida que los contagios cedieron.