En Australia, los supermercados han tomado una 'drástica' medida para frenar el acaparamiento de los licores, limitar cada compra a un máximo de 12 botellas de vino y 48 de cerveza por persona.
No se trata de luchar contra el alcoholismo, sino evitar se terminen las reservas ante la fuerte demanda, generada por el anuncio del cierre de los comercios "no esenciales", incluidos los bares, para luchar contra la expansión del Covid-19, informa Excelsior.
Según números publicados por el Commonwealth Bank, una de las importantes entidades financieras del país, el gasto en alcohol en las tiendas de licores aumentó un 86% la semana pasada.