Con apoyo de aviones, militares brasileños comenzaron a sofocar las llamas que arrasan la Amazonía desde hace semanas, y provocaron protestas contra el gobierno del presidente Jair Bolsonaro.
Unos 44 mil militares trabajan las 24 horas contra las llamas. Las Fuerzas Armadas se distribuyeron en cuatro estados que pidieron ayuda federal, informó el ministro de Defensa, Fernando Azevedo.
Los estados son Roraima, Rondonia, Tocantins y Pará. La primera misión del ejército fue desplegar 700 soldados en el área alrededor de Porto Velho, la capital de Rondonia.
El ejército brasileño utiliza dos aeronaves C-130 Hércules capaces de arrojar hasta 12 mil litros de agua, agregó el ministro de Defensa.
Los operativos del ejército fueron anunciados luego de innumerables críticas a nivel nacional e internacional contra el presidente Bolsonaro, por su manejo de la crisis.
A pesar de la preocupación a nivel mundial por los incendios en el Amazonas, el presidente Bolsonaro afirmó que la situación regresaba a la normalidad.
