La orca del SeaWorld de Orlando, que responde al nombre de Tilikum, murió a los 36 años. Se presume que su deceso haya sido provocado por una infección respiratoria que había minimizado su salud.
El cetáceo se hizo famoso el 24 de febrero de 2010, cuando mató a Dawn Brancheau, su entrenadora de 40 años de edad. Ella tenía 16 años de experiencia en este parque acuático de Florida.
Mediante un comunicado de prensa, Seaworld señaló “que están profundamente entristecidos al tener que anunciar que una de sus orcas más conocidas, Tilikum, murió temprano en la mañana, rodeada de los entrenadores, veterinarios y personal que le dio la mejor atención médica”.
Tras el incidente con su entrenadora, salió una controversia acerca de las orcas asesinas y los parques temáticos con esta clase de espectáculos y donde se sumó la denuncia cinematográfica de la cineasta Gabriela Cowperthwaite, titulada Blackfish (2013), en el que muestra su malestar contra el maltrato animal y cautiverio de los mismos al servicio de algún show.
