Continúan los destapes. Un antiguo ejecutivo de la constructora brasileña Odebrecht que ahora se ha convertido en delator, aseguró que la empresa pagó 32 millones de dólares a funcionarios públicos de Ecuador a cambio de cinco obras de infraestructura. La declaración la rindió a través de una videoconferencia como parte de un acuerdo judicial de cooperación eficaz.
José Conceição Santos, exrepresentante de la constructora, aseguró que entregó 16 millones de dólares en sobornos al exvicepresidente Jorge Glas, por medio de su tío Ricardo Rivera. Mientras que 14 millones fueron dados a cambio del 1% de contratos que la firma brasileña iba a obtener y otros 2 millones en 2010, para facilitar el regreso de la empresa a tierras ecuatorianas.
Asimismo, Conceição Santos dijo que Jorge Glas le pidió 1 millón de dólares para la campaña electoral de 2014 y que la solicitud habría salido de la misma presidencia. Sin embargo, el exdirectivo se negó a realizar el pago. Otro personaje vinculado al escándalo es el excontralor Carlos Pólit quien habría recibido poco más de 10 millones de dólares del dinero desembolsado.
