Con 58 votos a favor y ninguno en contra, el Senado argentino aprobó la ley que permite la investigación médica y científica del uso medicinal, y además garantiza el acceso gratuito al aceite que se extrae del cannabis a aquellos pacientes que lo requieran.
Sin embargo la medida no contempla el autocultivo, y en un principio este producto se importará desde los Estados Unidos. En ese sentido, ‘Mama Cultiva’, principal asociación productora de este aceite, quedó excluido de la legislación y por lo que seguirá siendo ilegal.
Argentina se une a países de la región como Colombia, Chile y Uruguay, que ya cuentan con legislaciones similares que autorizan el cultivo y uso de la marihuana con fines medicinales y científicos.