Verónica Andreina Montoya Araujo, de 25 años, detenida recientemente en Perú había sido acusada de asesinato en Venezuela y contaba con una orden de captura internacional por Interpol. Hace solo algunos meses fue denunciada de ser la autora intelectual de la muerte de la madre de su pareja en su país natal.
Desde que arribó al Perú, tuvo una vida en exceso, acudiendo entre discotecas y bares como sus lugares favoritos. Fue en uno de estos centros nocturnos ubicado en Pueblo Libre, cuando fue capturada gracias a una ardua labor de efectivos de la División de Investigación y de Homicidios de la Policía Nacional.
Cuando estuvo en la dependencia policial, puso resistencia ante las autoridades. Tras ello, publicó fotografías en sus redes sociales y justificó su accionar con mensajes de “ser víctima de xenofobia”.
