Al menos 200 trabajadores entre encargados de equipos de sonido, luces, seguridad, cantineros, mantenimiento y otros se ven perjudicados ante la disminución de asistentes y consumo en el Huaralino ubicado en Los Olivos por la delincuencia.
Uno de los afectados por la criminalidad es Juan Pablo Fernández, administrador de este local de eventos, quien desde hace 2 meses recibe mensajes y llamadas extorsivas.
A pesar de ello, el representante del Huaralino aseguró que continuará en su cargo porque no dejará que estas bandas criminales le arrebaten sus sueños.
SEGURIDAD PARA TODOS
Juan Pablo Fernández pidió al gobierno redoblar la seguridad en los locales de entretenimiento a fin de garantizar la vida de sus trabajadores y de los asistentes, ya que las organizaciones criminales como 'los injertos del cono norte' han encontrado su mina de oro en este rubro.
