La mala fe parece no tener límites. Un ejemplo de ello ocurrió en el grifo Centro Gas Diego, ubicado en Ate Vitarte, donde la cámara de seguridad del local registró una insólita forma de robo de combustible.
Mientras el empleado se encarga de llenar el tanque del vehículo, el conductor y el cobrador vigilan cada uno de sus movimientos. Una vez que retira la manguera del tanque, ambos huyen sin pagar por el servicio.
El trabajador y el administrador del grifo se acercaron a la comisaría para poner la denuncia, pero le dijeron que esta debía ser presentada por el representante legal del local o la persona directamente perjudicada.
NUEVA MODALIDAD DE ROBO
La empresa espera que esta nueva modalidad de robo sirva para alertar a otros centros de abastecimientos y así se tomen las medidas de precaución necesarias para evitar caer en la misma situación que es cada vez común.
