Esta mañana, alrededor de las 5 a.m., el local Oxy Romero, que perteneció a Mario Romero, el empresario que cobraba el oxígeno a precio justo y que falleció por la COVID-19, sufrió el robo de unos de los camiones que tenía capacidad para 80 balones de oxígeno de 10 metros cúbicos que llega a abastecer a 160 familias.
Esto ha generado un retraso en el servicio a los clientes que requieren urgentemente oxígeno medicinal. Al respecto, la representante de la empresa pidió a las autoridades que ayuden para recuperar su herramienta de trabajo para seguir colaborando con la población.