En Australia, abundantes lluvias abundantes se registraron este jueves en varias regiones que fueron asoladas desde hace meses por incendios forestales, que dejaron 28 personas y millones de animales muertos.
La temporada de incendios en Australia fue agravada por el clima particularmente caluroso y la ausencia de lluvia en los últimos meses debido al cambio climático. El agua que cae del cielo es sin duda una preciosa ayuda para los bomberos que combaten sin tregua el fuego.
"Buenas precipitaciones" de lluvia cayeron el jueves por la mañana en el estado de Nueva Gales del Sur (sudeste de Australia), donde están localizados los incendios más fuertes, informó la oficina meteorológica local.