Menores como enfermedades como el cáncer y parálisis cerebral son los nuevos afectados por el último golpe del Gobierno de Donald Trump contra los inmigrantes. Se trata de la eliminación de la visa especial para tratamientos médicos.
El hijo de la hondureña Mariella Sanchez es uno de los perjudicados. “Están matando no solo a mi hijo, sino a muchos que están recibiendo tratamiento en los Estados Unidos ya que nuestros países no nos ayudan”, dijo entre lágrimas la madre.
Muchos inmigrantes ya recibieron la notificación que deben abandonar del país. Ante dicha medida, los críticos la consideran un acto cruel pues obligará a los personas enfermas a aceptar un tratamiento de menor calidad en sus países de origen sin acceso a curar su enfermedad.
¿Alguien puede imaginar al gobierno ordenándote que desconectes a tu hijo del soporte vital, que lo saques de una cama de hospital, sabiendo que les costaría la vida?", indicó Anthony Marino, director de servicios legales de inmigración en el Irish International Inmigrant Center.