En Ohio, nuevamente, se vivió un tiroteo ocasionado por Connor Betts quien segundos después fue abatido. Este sujeto es autor de uno de los tres tiroteos masivos que han golpeado a Estados Unidos en menos de 24 horas.
El segundo ocurrió en las afueras del bar Ned Peppers, donde nueve personas perdieron la vida. Betts desató la balacera tras la masacre que causó Patrick Crusius con un rifle de asalto en Texas.
La cifra de fallecidos aumentó a 22. En esta masacre, ocho mexicanos murieron, ellos habrían sido el objetivo de Crusius, quien era un supremasista blanco que buscaba acabar con la ‘invasión hispana’. Este sujeto ahora está bajo custodia policial y podría enfrentar la pena de muerte.
Cientos de personas se movilizaron en vigilias en memoria de las víctimas, además reclamaron por un mayor control de armas, pues solo el 2019 ya se registraron 250 tiroteos.