Variadas han sido las celebraciones por Jueves Santo alrededor del mundo. Una de las más importantes fue la practicada por el Sumo Pontífice. Como lo hiciera Jesús con sus discípulos en la última cena, el papa Francisco lavó y besó los pies de 12 reclusos en una cárcel próxima a Roma.
En Filipinas, cientos de fieles participaron en los rituales de penitencia para emular el calvario de Cristo hasta el monte Gólgota. Los feligreses recorrieron las calles dándose latigazos en el cuerpo.
Diferentes fueron las actividades en Brasil, allí los fieles, encapuchados, recrearon la tradicional ‘Pasión de Fogareu’. Ellos representaron a los soldados que arrestaron a Jesús y lo llevaron ante las autoridades romanas.
En tanto, en Guatemala, los fieles pasearon las figuras de Jesus y María a través de las calles de la capital. Y en El Salvador, los fieles se disfrazaron de talciguines, demonios que salen a azotar a los visitantes antes de ser derrotados por Jesús.