Intentaban rescatar a quienes podían mientras las llamas consumían los puestos de un mercado en ciudad de Musayab al sur de Bagdad. Esto luego que una mujer, quien portaba un chaleco con explosivos cubierto bajo su velo detonara su carga.
El grupo terrorista Estado Islámico se atribuyó el ataque, en el que murieron 31 personas y otras 35 resultaran heridas.
Y en Moscú, un gran contingente policial se desplegó en la localidad de Kratovo a una vivienda donde un sujeto provocó un incendio y abrió fuego contra los transeúntes. Lo que se creía un atentado fue obra de un hombre con problemas mentales que asesinó a cuatro personas.
Según las autoridades el hombre logró escapar.
Un escenario similar a un atentado desató el pánico en la estación de trenes de Ámsterdam, cuando un hombre arrolló a ocho personas con un vehículo que estrelló con un muro tras golpear a las víctimas.
Un portavoz de la policía confirmó que el hecho haría sido un acto aislado. Sin embargo, vienen investigando.
