Una nueva denuncia recae sobre Luiz Inácio Lula da Silva, quien es acusado de recibir sobornos para beneficiar con medidas legislativas a empresas de automóviles. Estos presuntos favores se dieron entre el año 2009, cuando el ex presidente de Brasil era la máxima autoridad del país. Según las investigaciones, se habrían ampliado descuentos tributarios y moras a los montadores y fabricantes de vehículos.
“Yo no quiero ser juzgado por interpretaciones. Yo quiero ser juzgado por pruebas”, aseguró el ex mandatario brasileño. Su aprobación habría implicado el desembolso de alrededor de dos millones de dólares, destinados, aparentemente, a la caja del partido de los trabajadores, agrupación al que pertenece Lula Da Silva
Las pruebas encajan en la llamada Operación Zelotes, puesta en marcha en 2015 y que investiga presuntas irregularidades en el consejo administrativo de recursos fiscales. Las autoridades judiciales de Brasil ya reúnen todas las pruebas necesarias para abrirle un nuevo proceso a Luiz Inácio Lula da Silva, quien también es acusado de recibir sobornos por parte de la constructora Odebrecht.